jueves, 21 de noviembre de 2019

20 reglas de vida


El Instituto Francés de Ansiedad y Estrés, en París, trazó veinte reglas de vida que dicen los expertos que si consigue asimilar diez de ellas, con seguridad aprenderá a vivir con calidad interna:

1) Haga una pausa de 10 minutos por cada 2 horas de trabajo, a lo máximo. Repita estas pausas en su vida diaria y piense en usted, analizando sus actitudes.

2) APRENDA a DECIR NO, sin sentirse culpable, o creer que lastima a alguien. Querer agradar a todos es un desgaste enorme, además de imposible.

3) PLANEE su día, pero deje siempre un buen espacio para cualquier imprevisto, consciente de que no todo depende de usted.

4) CONCÉNTRESE en apenas una tarea a la vez. Por mas ágil que sean sus cuadros mentales, usted se cansa.

5) OLVÍDESE de una vez por todas que usted es indispensable en el trabajo, casa o grupo habitual. Por más que eso le desagrade, todo camina sin su actuación, a no ser usted mismo.

6) DEJE de sentirse responsable por el placer de los otros. Usted no es la fuente de los deseos, ni el eterno maestro de ceremonia.

7) PIDA AYUDA siempre que sea necesario, teniendo el buen sentido de pedírsela a las personas correctas.

8) SEPARE problemas reales de los imaginarios y elimínelos, porque son pérdida de tiempo y ocupan un espacio mental precioso para cosas más importantes.

9) INTENTE descubrir el placer de cosas cotidianas como dormir, comer y pasear, sin creer que es lo máximo que puede conseguir en la vida.

10) EVITE envolverse en ansiedades y tensiones ajenas, en lo que se refiere a ansiedad y tensión. Espere un poco y después retorne al diálogo y a la acción.

11) SU FAMILIA NO es usted, está junto a usted, compone su mundo pero no es su propia identidad.

12) COMPRENDA qué principios y convicciones inflexibles pueden ser un gran peso que evite el movimiento y la búsqueda.

13) ES NECESARIO tener siempre a alguien a quien le pueda confiar y hablar abiertamente. No sirve de nada si está lejos.

14) CONOZCA la hora acertada de salir de una cena, levantarse del palco y dejar una reunión. Nunca pierda el sentido de la importancia sutil de salir a la hora correcta.

15) NO QUIERA saber si hablaron mal de usted, ni se atormente con esa basura mental. Escuche lo que hablaron bien de usted, con reserva analítica, sin creérselo todo.

16) COMPETIR en momentos de diversión, trabajo y vida entre pareja, es ideal para quien quiere quedar cansado o perder la mejor parte.

17) La RIGIDEZ es buena en las piedras pero no en los seres humanos.

18) Una hora de INMENSO PLACER sustituye, con tranquilidad, tres horas de sueño perdido. El placer recompensa más que el sueño. Por eso, no pierda una buena oportunidad de divertirse.

19) NO ABANDONE sus tres grandes e invaluables amigas. Intuición, Inocencia y Fe.

20) ENTIENDA de una vez por todas, definitivamente y en conclusión que Usted ES LO QUE USTED HAGA de USTED MISMO.



Piense… Reflexione… Practique…
¡¡¡Que todo sea para el bien mayor!!!


(INSTITUTO FRANCÉS DE LA ANSIEDAD Y EL ESTRÉS)
 
 

viernes, 3 de mayo de 2019

Juanija Lagartija


Juanija Lagartija vivía entre unas piedras en el campo. Como a todas las lagartijas, le encantaba tomar tranquilamente el sol sobre una gran roca plana. Allí se quedaba tan a gustito, que más de una vez había llegado a dormirse, y eso fue lo que pasó el día que perdió su rabito: unos niños la atraparon, y Juanija sólo pudo soltarse perdiendo su rabo y corriendo a esconderse.

Asustada oyó como aquellos niños reían al ver cómo seguía moviéndose el rabito sin la lagartija, y terminaban tirándolo al campo después de un ratito. La lagartija comenzó entonces a buscarlo por toda la zona, dispuesta a recuperarlo como fuera para volver a colocarlo en su sitio. Pero aquel campo era muy grande, y por mucho que buscaba, no encontraba ni rastro de su rabito. Juanija dejó todo para poder buscarlo, olvidando su casa, sus juegos y sus amigos, pero pasaban los días y los meses, y Juanija seguía buscando, preguntando a cuantos encontraba en su camino.

Un día, uno aquellos a quienes preguntó respondió extrañado "¿Y para qué quieres tener dos rabos?". Juanija se dio la vuelta y descubrió que después de tanto tiempo le había crecido un nuevo rabito, incluso más fuerte y divertido que el anterior. Entonces comprendió que había sido una totería dedicar tanto tiempo a lo que ya no tenía remedio, y decidió darse la vuelta y volver a casa.

Pero de vuelta a sus rocas, precisamente encontró su rabito al lado del camino. Estaba seco y polvoriento, y tenía un aspecto muy feo. Alegre, después de haber dedicado tanto tiempo a buscarlo, Juanija cargó con él y siguió su camino. Se cruzó entonces con un sapo, que sorprendido le dijo:

- ¿Por qué cargas con un rabo tan horrible y viejo, teniendo uno tan bonito?
- He estado meses buscándolo - respondió la lagartija.
- ¿De verdad has estado meses buscando algo tan feo y sucio? -siguió el sapo.
- Bueno - se, excusó Juanija- antes no era tan feo...
- Mmm, pero ahora sí lo es, ¿no?... ¡qué raras sois las lagartijas! -dijo el sapo antes de largarse dando saltos

El sapo tenía razón. Juanija seguía pensando en su rabito como si fuera el de siempre, pero la verdad es que ahora daba un poco de asco. Entonces la lagartija comprendió todo, y decidió dejarlo allí abandonado, dejando con él todas sus preocupaciones del pasado; y sólo se llevó de allí un montón de ilusiones para el futuro.